Blanqueamiento dental láser

En el siguiente artículo te explicaremos en qué consiste el procedimiento de blanqueamiento dental láser, en qué casos debe aplicarse y qué cuidados se deben tener después de la realización del tratamiento. Esperamos esta información aclare tus dudas con respecto al tema y te permita tomar la mejor decisión para tu salud oral.

El blanqueamiento dental consiste en un procedimiento clínico, que pretende aclarar el color de uno o múltiples dientes mediante la aplicación de un agente químico, e intentando no modificar la estructura esencial de las piezas naturales. Las diferentes técnicas que ofrece esta clase de procedimiento se aplican de acuerdo a la condición o estado en que se encuentran los dientes, es decir, si están sanos o afectados. Para el primer caso, solo es necesario usar un agente químico que se conoce como peróxido, el cual se aplica desde el exterior y en el segundo caso desde dentro.
La aplicación de un blanqueamiento dental es necesaria cuando uno o varios dientes presentan un aspecto oscuro debido a causas hereditarias, medicamentos u otro tipo de procedimientos dentales.

¿En qué consiste el blanqueamiento dental láser?

El blanqueamiento dental que se realiza mediante el láser de diodo es ideal para cualquier persona que busque aclarar el color de sus piezas dentales. Aunque es importante que antes de la aplicación del tratamiento se lleve a cabo una examen del estado de los dientes para descubrir si no existe algún inconveniente que prohíba la intervención. El odontólogo será quien decida qué técnica aplicar antes de comenzar con el blanqueamiento dental láser.

Consejos después de la aplicación del blanqueamiento dental láser

1. Es importante evitar el consumo de alimentos que posean colorantes naturales o químicos.
2. En lo posible no ingerir bebidas como café, té, chocolate, vino o licores, entre otros.
3. Para cepillarse los dientes lo más indicado es no utilizar cremas que contengan colores artificiales.
4. Cumplir con una dieta alimenticia blanca que incluya lácteos, arroz, pan, entre otros productos de este tipo, por lo menos en el transcurso de siete días después del tratamiento.
5. Llevar a cabo una excelente y detallada higiene oral.